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Editorial 951

 


Innovación y emprendimiento

Persona innovadora es la que genera nuevas ideas y formas de hacer las cosas más simples, más fáciles, más fluidas y más eficaces. Joseph Schumpeter sugiere que las innovaciones son la clave del crecimiento económico y quienes implementan ese cambio de manera práctica son los emprendedores. Existen personas que sólo son innovadoras, otras son eprendedoras y también hay personas innovadoras y emprendedoras.

 

Si sigues haciendo lo mismo que has hecho hasta ahora, obtendrás los mismos resultados que has obtenido hasta ahora. Si quieres que cambien las cosas, antes debes cambiar tú, pues, nuestra vida y nuestras acciones son el reflejo de nuestras ideas, de nuestros sentimientos y de nuestras decisiones.

 

Esta época parece ser el inicio una nueva inteligencia y el camino hacia la creación de un lugar más pleno y consciente que comienza por la educación emocional, la cual es la plataforma para una verdadera trascendencia del ser humano. 

 

La innovación comienza por transformar la mera información en conocimiento vivencial y en sabiduría, de modo que la innovación comienza por el desarrollo de valores superiores. Se trata vivir orientado hacia el logro de la felicidad (no del gozo pasajero) es lo que forma seres independientes, inteligentes y creativos.

 

La mayoría de los seres humanos solo cambian obligados por las circunstancias. Son pocas las personas innovadoras empeñadas en cambiar las cosas y en construir un mundo mejor. Si no fuera por un pequeño grupo de personas creativas, innovadoras y emprendedoras, estaríamos anclados en la prehistoria.

 

En realidad, el progreso y la evolución es obra de toda la humanidad. Los grandes logros actuales en ciencia, tecnología, economía, cultura, convivencia, etc. se basan en los conocimientos y en la experiencia acumulada por la humanidad desde sus origenes hasta el día de hoy.


El invento de la rueda, fue un acontecimiento más importante que la llegada a la luna, y lo mismo ocurre con muchos inventos, aparentemente simples, creados por los humanos hace miles de años, los cuales sirvieron de base y de inspiración para las futuras generaciones, gracias a los cuales hemos llegado hasta donde estamos hoy.

 

Sin embargo, aunque toda innovación es mérito de la humanidad entera, sin el apoyo de la cual no existiríamos, lo cierto es que, el poder de las minorías es una realidad que se da en todos los ámbitos de la vida. En el reino vegetal, las plantas más fuertes se apoderan del espacio, de los nutrientes y de la energía solar. En reino animal, el pez más grande se come al más pequeño y en el campo humano, los más poderosos y los más astutos se imponen sobre los demás.

 

Es una minoría económica la que mueve los hilos de la economía. Es una minoría empresarial la que controla la producción y el comercio. Es una minoría la que maneja los laboratorios de medicinas. Es una minoría la que maneja el tema atómico, etc.

 

También existen otras minorías, menos conocidas y menos reconocidas, que son más importantes. Son las que impulsan la evolución de la sociedad. Son las que luchan porque se respeten y se hagan realidad los derechos humanos. Entre estas minorías estás tú, cuando eres honesto y tratas de dar lo mejor de ti en tu trabajo y en tus relaciones.

 

A lo largo de la historia siempre ha surgido una minoría creadora, tanto en el campo del progreso como en el campo del desarrollo humano. En cada época encontramos nombres de personas importantes que han sobrevivido al tiempo porque sus ideas y sus obras abrieron caminos hacia el futuro, y, gracias a estas personas innovadoras hemos progresado y hemos evolucionado y hemos llegado a donde estamos.

 

Las minorías innovadoras son los verdaderos líderes del mundo. Su liderazgo deriva de su desarrollo y creatividad. Es algo que nace de dentro y que se irradia, transformando todo lo que tocan. Una sociedad sin líderes se siente desorientada y abatida, debido a que la sociedad en sí es mediocre y carece de capacidad para progresar y para evolucionar. Por esta razón, cuando te encuentres con un líder del progreso material o del desarrollo humano, respétalo, admíralo, aprende de él y dale tu apoyo.

 

Los problemas del mundo no se deben tanto a los monopolios de las minorías que controlan los poderes económicos o políticos, sino a la mediocridad de la sociedad y a su incapacidad para generar soluciones y hacerse respetar.

 

La sociedad evoluciona a ritmo acelerado, gracias al desarrollo cerebral, impulsado por la información que se expande y llega hasta los confines del mundo. El cerebro de muchas personas es una fábrica de nuevas ideas y de nuevas soluciones que se imponen en todos los ámbitos de la vida (educativo, económico, laboral, empresarial, social, etc.) generando cambios importantes.
La única solución es renovarse cada día para no perder el tren del futuro.

 

Es un hecho que la mayoría de los profesionales están capacitados desde el punto de vista laboral, pero les falta fluidez, creatividad, visión, intuición y eficacia, debido a que son víctimas de las estructuras rígidas de la sociedad y de las instituciones a las cuales sirven. La Ley es: "Renovarse o morir"

 

Un estudio realizado por Ashby indica que el camino más eficaz, para el desarrollo de la inteligencia y para el éxito, puede resumirse en dos palabras: "Capacidad selectiva" por lo cual, su posibilidad de sobrevivir y de triunfar, depende de su capacidad de prever y de seleccionar entre varias alternativas, la que conduce a la "mutación", es decir, al desarrollo.


Las personas que triunfan son las que tienen un proyecto de vida valioso y viven mirando al futuro tratando de cambiar las cosas en vez de esperar que las cosas cambien.

 

Hoy se habla mucho de innovación y de emprendimiento, y muchas empresas y muchas personas se embarcan en nuevos proyectos que al final fracasan por muchas razones.

 

Vivimos en siglo XXI, caracterizado por la globalización, las telecomunicaciones, la neurociencia y la neurolingüística. Se trata de un mundo nuevo que exige cambios estructurales en ideas, criterios, métodos, actitudes, producción, relaciones y formas de vivir de enseñar y de aprender.


Estos cambios no se logran con leyes, ni con planes teóricos, ni con simples reformas. Se necesitan cambios estructurales profundos, orientados a la renovación de la inteligencia y de la conciencia personal y social, pero nadie cambia por presión externa. Las personas sólo cambian cuando desarrollan la inteligencia y la conciencia, cuando adquieren una visión superior de la vida y cuando entran en la dinámica de la evolución.

 

La velocidad y la globalización son características de la vida actual, lo cual exige fluidez mental y visión global de las cosas. Fluidez para no perder el tren del futuro y visión global para posicionarnos dentro del contexto real de la vida.

Necesitamos hacer las cosas más simples, más fluidas y más eficaces.

 

La vida es evolución, cambio... lo cual hace que surjan nuevas necesidades que satisfacer y nuevos intereses. La vida humana es un continuo de innovación y de emprendimiento en todos los aspectos. En otras épocas, la innovación y el emprendimiento eran procesos lentos y largos, pero hoy estos procesos son rápidos. Lo que hoy es de actualidad, mañana puede ser obsoleto. Sin embargo, las cosas importantes, como la honestidad, la responsabilidad, la disciplina y otros muchos valores permanecen en el tiempo.

 

Para cambiar el mundo por fuera, antes hay que cambiarlo por dentro. Por la misma razón, para ser innovador y emprendedor, antes debes dejar de lado los viejos hábitos y renovarte mentalmente.

 

 

 

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    Lic. David Angulo de Haro

 

 

 

 

 

 

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